ASESORÍA Y TRABAJO
CON GRUPOS
BLANCA
NOEMI CORTES ALCANTAR
5º “A”
T/M
CD. GUZMÁN,
JALISCO; MPIO DE ZAPOTLAN EL GRANDE
EL PAPEL DEL INTERVENTOR EN LA ASESORÍA
Y TRABAJO DE UN GRUPO
Introducción:
El
licenciado en intervención educativa es un profesional de la educación que
interviene en problemáticas sociales y educativos que trasciende los límites de
la escuela y es capaz de introducirse en otros ámbitos y plantear soluciones a
los problemas derivados de los campos de intervención a través de la puesta en práctica
de sus conocimientos y competencias.
Como
bien sabemos el campo de intervención es amplio pero en este sentido nos
enfocaremos en la intervención que el Lic. efectúa en los grupos.
Es importante
que el Licenciado en Intervención Educativa este empapado y tenga los
conocimientos y las pautas a seguir a la hora de intervenir, en primer lugar
que conozca que es un grupo así como sus características, y en el núcleo de
este, que es el trabajo colaborativo, y cuál es el objetivo que se pretende
alcanzar, también es importante tener en cuenta que se enfrentara a distintas
situaciones en donde tendrá que aplicar una orientación especializada ya sea
individual o grupal según sea el caso y el contexto.
Es esencial
que el Licenciado en Intervención Educativa tenga un control sobre sí mismo y
sus emociones de lo contrario el desconocimiento que tiene el Interventor de sí
mismo y de sus acciones al interior del su grupo, lo llevan, algunas veces a
actuar de manera inadecuada en el logro de un ambiente propicio para el aprendizaje,
es vital que el Interventor conozca a su grupo pues de tal acercamiento podrá obtener
ventajas no sólo para beneficiar el aprendizaje de los sujetos, sino también
para que su trabajo sea de mayor calidad.
La
comprensión del proceso del grupo aumenta la posibilidad de una orientación
hacia un objetivo y permite una más rápida modificación de objetivos u otros
elementos de cara a la superación de los obstáculos. A la vez que todos los
integrantes del grupo son conscientes y se asume el proceso, se está
estimulando la participación y el logro de objetivos.
Desarrollo:
Un
grupo está formado por un conjunto de personas que desempeñan roles específicos
y recíprocos, que actúan de acuerdo a normas, valores y fines que fueron
acordados previamente a su formación formal para mantener la continuidad y
estabilidad del mismo en una sociedad.
Como
ya se menciono anteriormente, el estudio de los grupos humanos es importante ya
que nos posibilita conocer y comprender como Interventores, los diferentes comportamientos
de los sujetos, y así apreciar los
diferentes contextos donde se desenvuelven tales grupos, es importante tener en
consideración principalmente aspectos relacionados con su cultura, lengua e
interacciones sociales, políticas y religiosas y a partir de esto aprobar o
rechazar los comportamientos. Generalmente las personas que integran los grupos comparten ideas, gustos,
proyectos u otras circunstancias que hacen que se agrupen, en muchos casos y
situaciones, estos pueden llegar a ser tan determinantes y poderosos como para
generar ellos mismos algún cambio importante para el bien y la
evolución de la sociedad o bien haber llevado a buen puerto alguna iniciativa
que resultó ser un hallazgo para la comunidad a la cual pertenecen. Pero
también pueden situarse del lado contrario y convertirse en importantísimos
obstáculos si lo quieren y su poder los avala.
Es importante
saber que un grupo posee sus propias normas, valores, y especificidades que lo
hacen diferente de otros grupos, y en el
análisis del grupo son básicas las aportaciones de la psicología y de la
pedagogía para reconocer y considerar los sucesos que ocurren al interior del
grupo. De ahí la importancia de conocer las normas, valores, objetivos, interacciones,
emociones y afectos, ya que permite la identificación de aquellos factores que ayudan
o dificultan el proceso de enseñanza-aprendizaje.
En la
Intervención se encontraran distintos
casos de grupos, unos estarán en armonía y otros todo lo contrario un ambiente de desarmonía en donde no hay integración
ni se logren los objetivos que se pretenden alcanzar, el interventor educativo dará
orientación y asesoría a este tipo de grupos a través de estrategias que logren
la integración y el objetivo principal, que es que a través de estas
estrategias se logre un aprendizaje significativo, que ayude en el desenvolvimiento
permanente del sujeto en todos los sentidos.
En
un grupo se establecen diversas formas
de relacionarse entre los sujetos ya sean unas permitidas y preparadas por el
Interventor, y otras dadas de forma espontánea por los mismos sujetos, las
cuales están determinadas por el contexto en que se enmarcan. Ante ello, el
Interventor establece normas de comportamiento en el grupo y en ocasiones puede
llegar a olvidar que el grupo establece sus propias formas de relación y por
consiguiente la manera en que les agradaría aprender.
Un punto
importante para lograr una interacción grupal es el trabajo colaborativo como una posible estrategia
didáctica-metodológica, pues este propicia el uso de la lengua oral y escrita
como un medio de expresión. La colaboración favorece una interacción,
integración y aprendizaje grupal que lleva a los sujetos a tener mayor
seguridad al discutir con sus compañeros lo que saben, y al tratar de encontrar
soluciones en grupo a problemas planteados.
Lo que
se pretende a través de la Intervención Educativa en un grupo es que el sujeto-Interventor, busque cómo aprovechar
las capacidades de actuación y decisión que tiene el grupo para promover su
propio aprendizaje, es decir, un aprendizaje grupal que se enmarque en la
comprensión y el diálogo entre el Interventor y los sujetos y no sólo se centre
en contenido escolar.
Cabe
señalar la importancia de las técnicas y estrategias en el grupo, estas
asumidas por el Interventor Educativo, refiriéndonos a estrategia como el arte
de planear y dirigir y a técnica como la habilidad para hacer uso de procedimientos.
Aquí
algunas ventajas de utilizar este tipo de acciones.
·
Favorecen el hecho de que los alumnos
aprendan a aceptarse mutuamente y a cooperar.
·
Consiguen que se sientan miembros de un grupo
y experimenten hacia ese grupo gran variedad de sentimientos positivos, a la
vez que aumentan su seguridad personal al sentirse apoyados.
·
Estimulan los diversos aprendizajes y
favorecen la actividad dirigida al logro de unos objetivos previamente
establecidos.
·
Facilitan el desarrollo intelectual y
afectivo del alumno, que puede realizar diversos ejercicios y actividades que
constituyen su visión del mundo y del desarrollo
de la ciencia.
·
Mejoran el clima o atmósfera en el sentido
que disminuyen las tensiones y malos humores y consiguen un ambiente
suficientemente relajado y entusiasta como para que tanto alumnos como
profesores puedan trabajar a gusto y con eficacia.
·
Proporcionan seguridad y relajamiento, los
sujetos, progresivamente, van haciéndose responsables de sus aprendizajes al
entender que, cuando aprenden, no están respondiendo a la demanda del docente sino
a su propia demanda interiorizada de
expansión y desarrollo.
Se tiene
que establecer confianza, se han de reducir al máximo las tensiones y los
sentimientos de intimidación.
Las
relaciones interpersonales amistosas, de camaradería, etc. reducen la intimidación
y permiten el cambio de orientación, pasando los problemas interpersonales a
objetivos del grupo. Por tanto, habrá que solucionar los conflictos latentes o
explícitos, evitando los correspondientes mecanismos de defensa (retraimiento,
autorreferencia, negativismo, etc.). Cuanto más se conocen los integrantes de
un grupo es mayor el clima de confianza que se puede lograr. Este principio,
tiene mucho que ver con el papel que asume el Interventor y su ejercicio del
liderazgo.
Conclusión:
El
grupo ha de conseguir una comunicación fluida y espontánea, de manera que
puedan surgir comentarios, discusiones sin motivación o incentivación expresa
del Interventor, participación espontánea y libre en las cuales se obtenga la
adopción de decisiones.
Para
ello se debe crear el clima en el que los individuos perciban y se sientan en
libertad de acción, evitando la polarización, fruto más de la personalidad del
que discute que de la idea que se discute.
Debe
tenerse en cuenta, pues, que las controversias presentes en el grupo son a
menudo el resultado de conflictos emocionales del mismo y poco tienen que ver
muchas veces sobre la actividad en la cual se está trabajando. Por tanto, como
ya se ha indicado en otro momento, habrá que solucionar previamente los
conflictos si queremos hacer operativo el grupo.
El
Interventor Educativo tiene que llevar una evaluación continua, como hemos
indicado anteriormente, de los objetivos y de las actividades del grupo, que
permitan una depuración y una modificación inteligente del proceso de
resolución de problemas, en cualquier fase de toma de decisiones. En todo
momento se han de adaptar los objetivos, contenidos y actividades a los
intereses, necesidades y ritmo del propio grupo.
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muy bien tu trabajo Blanca, felicidades ya quedo registrado....
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